Comparación de la adherencia generada por dos programas de ejercicio físico comunitario con duraciones y protocolos diferentes en pacientes con factores de riesgo cardiovascular.
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García Sánchez, EstherFecha
2019Disciplina/s
MedicinaMateria/s
Fisiología del ejercicioResumen
El ser humano está diseñado para moverse y su evolución siempre ha estado ligada al movimiento, por tanto, al gasto energético (GE) a través de la actividad física (AF) necesaria para realizar determinadas tareas fundamentales para su supervivencia, como la caza. La “teoría del genotipo ahorrador” explica que en épocas de carencia de alimentos los individuos con ese genotipo (somatomedina), tenían una mayor probabilidad de supervivencia, ya que podían almacenar en forma de grasa parte de la energía de los alimentos, además de, dotar de una eficiencia energética mayor en la contracción muscular y tener unas posibilidades mayores de reproducción1,2. La necesidad de movimiento va ligada al ser humano desde sus inicios, ya que se desarrollaron como cazadores‐ recolectores y dependían de su capacidad física para adaptarse y sobrevivir a un entorno cambiante. Con el comienzo de la agricultura, hace aproximadamente unos 10. 000 años A.C., esa necesidad de adaptación al medio para sobrevivir y...